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¿Encías retraídas? Te damos soluciones

Las encías retraídas es una patología muy común en la mayoría de la sociedad y es un problema que debe ser tratado de forma correcta, no solo por razones estéticas sino porque también pueden suponer un grave problema para la salud y provocar molestias. A continuación, te hablaremos sobre las causas más comunes de las encías retraídas y sobre cómo podemos tratar esto.

Causas de la retracción de las encías

Las enfermedades periodontales son la causa principal de la retracción de las encías y podemos encontrarnos tanto con casos de gingivitis como la periodontitis. La gingivitis ocurre cuando las encías se inflaman debido a los restos de comida o la placa dental cuando se forma sarro. Es una enfermedad que podemos encontrar en casi el 91% de la población. Cuando hay gingivitis podemos ver sangre a la hora del cepillado. La periodontitis ocurre cuando no tratamos correctamente la gingivitis. En este caso, al dejar que la placa se acumule se crea una bolsa periodontal que estropea el diente. Debido a la periodontitis podemos incluso llegar a perder el diente.

El tabaquismo es otra de las razones por la cual se retrae la encía. Debido al tabaco podemos adelantar la enfermedad periodontal. Además, cuando cepillamos los dientes con fuerza o en exceso podemos quemar las encías, sobre todo si lo hacemos con un cepillo con las cerdas muy duras. Una mala ortodoncia también puede dañar las encías en caso de que los dientes salgan de la tabla ósea. El bruxismo es otra causa muy común de la retracción de las encías, ya que a la hora de apretar los dientes podemos dañar las encías. Los factores de riesgo para que se den todos estos problemas pueden ser genéticos, por enfermedades del sistema inmunitario, una mala higiene, el estrés y el consumo de tabaco.

Soluciones para las encías retraídas

Las encías son una parte de nuestra boca que no pueden regenerarse de forma natural y necesitaremos acudir a profesionales para solucionarlo. No es posible curar las encías por nuestro propio pie, ya que no existen remedios caseros para ello. Pero lo que sí podemos hacer es eliminar aquellas causas y factores por los que ocurre la retracción de la encía. Dejar de fumar tabaco y de consumir productos ácidos, cambiar nuestra alimentación y mejorar nuestra higiene. Además, podemos acudir a profesionales para ponerle fin a la periodontitis, la gingivitis, el bruxismo o cualquier otro problema que tengamos.

Los profesionales pueden además realizarnos alguna intervención como el estiramiento de las encías. Cuando el paciente tiene papilas interdentales podemos estirar la encía y cubrir esa raíz descubierta del diente. Otra técnica muy interesante son los microinjertos de encía. En este caso tomamos un trozo del paladar con un corte muy pequeño y cubrimos la encía. Aunque anteriormente la intervención se realizaba de forma muy aparatosa, con una cirugía de una extensión muy compleja, hoy en día es mucho más sencilla. Con las nuevas técnicas los injertos de encía son una cirugía muy poco invasiva en la que solo necesitamos un par de puntos.<

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