¿Qué es la Ortodoncia?
La ortodoncia es una especialidad de la Odontología que se ocupa del diagnóstico, prevención y tratamiento de las malposiciones dentarias y de las deformidades de los maxilares. No solo es mover dientes para una correcta colocación, también protege la salud de nuestra dentadura haciéndola más duradera y aportando mayor calidad de vida.
¿Es dolorosa?
No, la ortodoncia no es dolorosa. Es cierto que los primeros días, hasta que la boca se acostumbra al aparato, pueden aparecer molestias y, en algunos casos, llagas, pero casi nunca dolor. En cualquier caso, son molestias temporales, que se suavizan con los consejos que facilita el ortodoncista y terminan desapareciendo.
Objetivos de la ortodoncia
La ortodoncia tiene como objetivo la mejor colocación de los dientes con el fin de conseguir una mordida adecuada para una óptima masticación y una correcta apariencia estética, siempre a través de tratamientos específicos y personalizados a cada paciente.
La Ortodoncia: ¿por qué es necesaria la ortodoncia?
El tratamiento de ortodoncia es necesario cuando, por la posición inadecuada de los dientes o por el crecimiento no armónico de los huesos maxilares, se produce una deformidad dental o facial que conduce a la aparición de problemas secundarios como las caries, las inflamaciones de las encías, la dificultad en la masticación o una mala apariencia estética. En todos estos casos, así como siempre que lo recomiende el dentista habitual, se recomienda acudir al ortodoncista.
Estas anomalías son tan corrientes que se ha demostrado que el noventa por ciento de la población requiere de un tratamiento de ortodoncia en algún momento de su vida.
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¿Cuándo se debe ir al ortodoncista?
No hay edad para acudir al ortodoncista. Se recomienda una primera visita a partir de los seis años, momento en el que comienza la dentición permanente, así como la aparición de las muelas más importantes: los primeros molares. Esta ortodoncia preventiva que, salvo en casos muy acusados, no suele implicar un tratamiento, es vital para la detección precoz de posibles alteraciones.
Más adelante, entre los seis y diez años, se puede hablar ya de una ortodoncia infantil interceptiva en la que se pueden corregir tanto las anomalías esqueléticas, gracias a la plasticidad de los huesos del niño, como las deformaciones dentarias. Una ortodoncia en esta etapa ayuda a eliminar los malos hábitos, preparar un buen espacio para los nuevos dientes y contribuye a la adquisición de una buena rutina de higiene dental.
La Ortodoncia correctiva se aplicará a partir de los doce años, cuando finaliza el recambio de los dientes de leche por los definitivos y el crecimiento del hueso ya se define.
De ahí en adelante, cualquier momento es ideal para la ortodoncia de adultos, ya que siempre se pueden colocar los dientes en la posición correcta, sea cual sea la etapa de la vida en la que nos encontremos.
¿Qué pasa en la primera visita?
Solo en la primera visita el doctor ya puede informarte de:
- Los problemas que presenta tu boca
- Los aparatos que se usarían para corregirlos
- La duración estimada del tratamiento
- El coste y financiación del mismo
Después de la primera visita y antes de empezar con el tratamiento, para realizar un diagnóstico más preciso de tu caso, es necesario un estudio que se completará con los siguientes registros:
- Una ortopantomografía
- Una telerradiografía lateral de cráneo
- Fotos digitales orales y faciales
- Modelos en escayola
La Clínica de Ortodoncia Ponce de León dispone de un programa de alta tecnología para la digitalización de la cefalometría y casos quirúrgicos.
Antes y después de los tratamientos en nuestra Clínica de Ortodoncia en Alicante
Falta de espacio grave
Apiñamiento grave, con falta de espacio para la erupción de caninos superiores. El paciente también tenía una acusada sobremordida (los dientes de arriba tapaban completamente los de abajo), lo cual limitaba la función masticatoria.
Caninos altos
Rocío vino a la consulta porque le faltaba mucho espacio para la erupción de sus dientes. Su paladar necesitaba expansión para que los dientes pudieran erupcionar correctamente.
Mordida cruzada y falta de espacio superior e inferior
La paciente acudió a la consulta porque quería cambiar el aspecto de su sonrisa, pero estaba muy preocupada por la estética de los aparatos. Este caso lo resolvimos con ortodoncia lingual superior y brackets estéticos inferiores.
¡Localízanos!
Avenida Federico Soto 11, 6º D, 03003 Alicante
Teléfono: 965207292
E-mail: info@clinicaponce.com
¿Y qué opinan nuestros pacientes?
Clínica Ponce de León está especializada en la práctica de la ortodoncia. Esta especialidad se centra en la prevención y corrección de las irregularidades dentales. Para ello, un equipo de ortodoncistas se encargan de analizar cada patología y realizar un tratamiento personalizado, de acuerdo con el problema y la edad del paciente
Mi novia decía que para la boda yo tenía que estar muy guapo, que las fotos de ese día se guardaban para toda la vida, que yo no podía seguir sonriendo ocultando los dientes. En la Clínica Ponce de León, una vez que valoraron mi caso, me aseguraron que llegaría con los dientes arreglados para dar el «Sí quiero». Así que me puse en sus manos. La verdad es que estoy muy satisfecho, porque aunque fue algo que inicié por dar gusto a mi novia (ahora esposa), me he quedado con estos dientes perfectos y esta sonrisa ya para toda la vida.
Por mi carácter un poco intimista y nada sociable, solía pensar que la ortodoncia no era algo para mí, ya que creía que era un cambio estético que podían necesitar personas con más vida social o con un trabajo de más cara al público que el mío. Sin embargo, padecía unos dolores de mandíbula que terminaban en dolores de cabeza. En la clínica de ortodoncia Ponce de León comencé un tratamiento para corregir lo que luego supe que se llamaba «maloclusión». Sé que suena a trillado, pero fue un cambio en mi vida. No he vuelto a tener dolores de cabeza ni mandibulares y mis familiares aseguran que hasta vocalizo mejor.
Para mí fue determinante cuando en un juicio, a causa de mi mala dentadura, escupí al hablar, sin querer, a un testigo. Literal. En la clínica Ponce de León me facilitaron un tratamiento, de ortodoncia lingual, que apenas se notaba y que me fue corrigiendo la alineación dental. Hoy debato extensivamente sin temor a ningún episodio vergonzante.
Yo era de esas personas que se tapan con la mano cuando sonríen. Hasta mis amigos más íntimos pensaban que yo era tímida, tal era mi comportamiento ante el público y mi apocamiento sobre todo en las comidas y cenas juntos. En la clínica Ponce de León no sólo me ofrecieron el tratamiento de ortodoncia adecuado para mi boca, sino que de verdad, cada vez que iba a la consulta, sentía que había asistido a terapia. Me explicaban todo tan bien, el porqué de cómo estaban mis dientes y cómo los iban a ayudar a poner en su sitio correcto, que fui gradualmente cogiendo confianza en mí misma. Y hasta hoy, que sigo pensando que la ortodoncia me cambió la vida, pero no solo por el tratamiento en sí.
Trabajo de cara al público todo el día y procuro que mis productos tengan la calidad que mis clientes requieren. No podía seguir ofreciendo nada de ello con la boca tal y como la tenía. En la Clínica Ponce de León me ofrecieron un tratamiento rápido de ortodoncia gracias a Acceledent y ahora sonrío satisfecha a las clientas segura de que mi físico está a tono con el género que ofrezco
Mi hijo necesitaba llevar ortodoncia pues los dientes habían salido especialmente mal colocados. La financiación de la clínica Ponce de León es insuperable ni por el mejor de los bancos y para mi hijo ha sido coser y cantar. En la consulta lo involucraron de una manera tan sencilla en el tratamiento que ha sido más una diversión que una tarea engorrosa. Ha estado encantado y todavía hoy le chifla ir por allí, pues se encontraba como en casa.
El dentista derivó a mi hija a un ortodoncista y me recomendaron la clínica Ponce de León por su buen trato hacia los niños. Estoy encantada. Mi hija va feliz, le explican todo antes de hacerle nada, nunca es doloroso y siempre sale contenta y encima con algún regalo.