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Carillas dentales, ¿qué son y cómo se mantienen adecuadamente?

Las carillas dentales son un tratamiento de ortodoncia cada día más demandado por aquellas personas que desean lucir una sonrisa de película. Consiste en unas láminas que se fabrican en un laboratorio y que se unen a la parte externa de la pieza dental para darla la forma y el color que se desee. Se trata de una solución muy eficaz para todos los pacientes que desean mejorar sus dientes sin retocarlos en exceso.

Tipos de carillas dentales

Existen dos tipos de carillas. Una son las de composte y las otras las de porcelana. Las primeras están especialmente indicadas para aquellas piezas dentales que tienen una forma irregular, su tamaño se encuentra alterado o hay manchas en las mismas. Consiste en aplicar sobre las mismas un material para moldear sobre el diente para darle la forma deseada y en una única sesión.

Por otro lado, están las carillas de porcelana que son unas láminas que se hacen en el laboratorio a medida y que se cementan sobre los dientes para darles el color, el tamaño y la forma deseada. Son necesarias varias visitas, ya que el primer paso es tallar el grosor del diente, después tomar medidas y por último, colocarlas.

Cuidados de las carillas dentales

Aunque las carillas dentales suelen durar mucho tiempo, especialmente las de porcelana, es necesario seguir una serie de cuidados para que se mantengan en perfecto estado siempre.

Imprescindible es cepillarse los dientes después de cada comida con ayuda de un cepillo de cerdas medianas o suaves. Hay que hacerlo en forma de barrido para no dañar el sellado marginal que existe con las carillas. En cualquier caso, se recomienda acudir a una revisión con el especialista cada seis meses para que él mismo compruebe si todo está en orden. Igualmente una vez al año, habrá que pulir las carillas para eliminar las manchas que puedan tener a nivel superficial.

Una persona fumadora tiene que evitar hacerlo para cuidar sus carillas. Si de por sí el tabaco amarillea los dientes, con las carillas sucede lo mismo. Otro cuidado fundamental es evitar el consumo de azúcar. También se deben evitar las bebidas que lleven colorante como el té, el café, el vino o los refrescos oscuros, puesto que mancharán los carillas.

Por último, también hay que tener mucha precaución a la hora de masticar y no cortar ningún objeto con los dientes. Si se tiene el hábito de morderse las uñas, hay que erradicarlo completamente si se desea que las carillas tengan una vida útil muy larga.

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